El luchador.

El luchador se enfrentó a todo. Hasta a su mismo sueño para convencerle de cuanto lo deseaba.
Luchaba por lo que amaba y en lo que creía.
Barreras y muros le cortaban el paso y peleaba contra ellos por derribarlos.
Tormentas y mareas retrasaban su paso hacia el destino en el que creía, pero el seguía adelante.
Sacrificaba cada cosa de si mismo que le exigía el sueño para acercarse un poco más a el.
Y cada vez los muros eran mas altos y fuertes. Mas terribles las tempestades que le iban arrancando trozos de si mismo que se dejaba en su lucha por su sueño. Había dejado en su caminar creencias y partes de el, jirones de su piel, pedazos de alma por alcanzar al sueño.

Lo tenía a la vista, tan cerca...
Pero ya estaba cansado y herido. Cada nueva astilla en su caminar era como un alto muro que le impedía llegar. Y su sueño lo miraba extendiendole la mano, pero a la vez exigiendo un nuevo esfuerzo.
El luchador sólo es un hombre y el sueño no se da cuenta.

Gallery on the street

Perseguir un sueño implica un trabajo, esfuerzo y lucha. Enfrentarse a muchas dificultades por llegar hasta el.

Lo verdaderamente valioso es no rendirse por dificiles que sean los obstaculos.

Hay luchadores que día a día persiguen su sueño en contra de todas las adversidades.

Si no hay una galeria donde exponer su arte, da igual. Tarde tras tarde colocan su propia galería en una acera, en cualquier calle y nos regalan la posibilidad de verles trabajar, crear.

Un día conseguirán su sueño, lo merecen pero no esperan que llegue solo. Salen a buscarlo cada día.

El artista fotografiado aquí es Mario, al que conocí en las Ramblas de Barcelona y me regaló estas imagenes.

Gracias Mario

 

 

 

 

Hoy

Piensa.



Si este fuese tu último día, si la próximas horas las últimas en este mundo.


¿Qué harías?


Perdona que te de prisa. No pienses más, haz eso en lo que estás pensando y hazlo ya, ahora por que no sabes si este es tu último día. No sabes si son las últimas horas que estarás aquí.


Da ese beso que tienes pendiente.


Di ese te amo que te quedó en la garganta.


Siente y haz sentir ese abrazo que debiste dar.

Pon en marcha ya ese sueño que tienes guardado en un cajón.


Hoy no es tu último día y te quedan miles de horas por vivir y planes y proyectos que hacer, pero no te descuides, no dejes pasar el tiempo como si no hubiese un final.